Mi nombre es Mayte Cruz, madre de 2 hijos; perdí a mi padre cuando tenía 7 años de edad, viví mi infancia en un pequeño pueblo de Veracruz, en el cual las oportunidades son menores a las que hay en otras lugares, entre mi hermano y yo tuvimos que ayudar a mi madre a trabajar en el negocio familiar, una carnicería, al terminar la preparatoria y entrar a la universidad las oportunidades de continuar mis estudios se reducían por lo que decidí buscar mis propias oportunidades en otro lugar, viaje con una prima a la Cd. de Reynosa, Tamaulipas para buscar trabajo y poder continuar mis estudios en ese entonces tenía 17 años, cuando llegue a Reynosa el plan era trabajar únicamente durante el verano para poder obtener el dinero para mi inscripción, útiles escolares y un poco para poder solventar ese año en la escuela y regresar el siguiente verano a continuar trabajando.
Al llegar a Reynosa viví un mes con una tía quien me recibió en su casa en lo que buscaba donde vivir, tuve un dia para aprender a andar en esta ciudad, se imaginan una jovencita de 17 años que nunca había vivido en otro lugar más que en un pueblito donde a todos los lugares llegas caminando, tomas un transporte únicamente si te tienes que mover a otro pueblo o ciudad, pero si no recorres todo el pueblo caminando, para mi llegar a la ciudad era algo totalmente nuevo, en el fondo tenía miedo a ese nuevo mundo, gente de todos lugares del país, un ritmo demasiado acelerado para lo que estaba acostumbrada a vivir, pero no tenía opción, ya estaba ahí y no podía regresar, nunca he sido de volver atrás.
Encontré trabajo en una maquiladora, era operadora de producción, al mes y medio de estar en Reynosa, me llegó una sorpresa, era mi madre, la cual al ver que me había adaptado pronto y que podría tener más oportunidades en la frontera, decidió seguirme y pedirme nos quedáramos a vivir acá, recuerdo que ese dia llore, ya no tenía opción de regresar, no iba a dejar a mi madre sola, siempre hemos sido los tres juntos, y paso por mi mente, mi escuela, mis amigos, mi casa; acá no tenía nada de eso, pero tenia trabajo y mejores oportunidades, así que no había retorno, tenía que seguir con mi vida en este nuevo lugar. Inicié con las aplicaciones para seguir estudiando, porque mi meta si la tenía clara, yo quería terminar mi carrera, así que entre a el Tecnológico de Reynosa para continuar con mis estudios, mi día comenzaba a las 5 am, trabaja de 7:00am a 4:30 pm, mi horario de clases era de 5:00 a 10:30 pm, asi que tenia que salir corriendo para estar en tiempo, al terminar mis clases, regresar a casa, a mis actividades del hogar por lo que dormía alrededor de 5 hrs diarias.
A mitad de mi carrera tuve mi primer hijo lo cual sumaba actividades de mi día a día, me moví a una casa cerca de mi escuela y mi trabajo para poder estar el mayor tiempo posible con él, yo continuaba trabajando y estudiando. En mi vida laboral, me dieron oportunidad de crecer, ahora era técnico en la empresa, un nivel más, continué esforzándome y para cuando terminé la carrera, la empresa ya me estaba promoviendo a posición de Ingeniero, ahora tenía otro reto, el idioma, no hablaba mucho inglés ya que mis recursos nunca habían sido suficientes para poder estudiar otro idioma, realizando un esfuerzo y pensando en que sería una inversión para mi y mi hijo estudie en la Universidad de Texas en Edinburg, Tx, terminé mis cursos y eso me ayudó a seguir creciendo.
A mis 28 años tuve mi segundo bebé, una niña la cual al igual que mi hijo amo con todo mi corazón, ya era otra historia, tenía más tiempo y un mejor trabajo, pero yo quería seguir superándome, sin embargo los gastos eran mayores, por lo que conseguí un trabajo extra a la empresa donde laboraba para poder solventar mis estudios, impartía clases durante los fines de semana en una universidad de la ciudad, así fue como me ayudé económicamente para solventar mi maestría en Administración de Negocios con especialidad en Calidad y Productividad, continúe estudiando logrando certificaciones en la industria automotriz, actualmente soy Auditor líder en IATF, Auditor VDA, Representante de Seguridad de producto de la industria automotriz Alemana y he tomado varios cursos con diferentes compañías automotrices, tengo un diplomado, el cual cursé en el Centro Europeo de Desarrollo Ejecutivo, con toda esta preparación y esfuerzo llegó mi promoción a Gerente de Calidad de la empresa en la cual laboro actualmente, tengo ya 8 años en esta posición, lo cual no es fácil ya que más del 90% de mis colegas son hombres, pero todos los días doy mi mejor esfuerzo para lograr mis objetivos.
Cuando volteo atrás y veo todo lo que he vivido, no me arrepiento de ninguna de las decisiones que he tomado en mi vida, algunas han sido buenas otras no tanto, he aprendido de todo, he tenido gente buena y mala en mi camino, de todos he aprendido, siempre motivo a mis hijos, familia y equipo de trabajo a seguir creciendo, seguir adelante, me da gusto ver que se superan y me gusta compartirles que si se puede cuando se quiere y damos todo nuestro esfuerzo por conseguir nuestras metas, mi motivación mis hijos, mi ejemplo mi madre, mi motor y mi roca DIOS quien siempre ha estado conmigo, todo lo que he logrado es gracias a él, él me ha mostrado que «el cielo es el límite».
Mayte Cruz
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Hermosa y motivadora historia! Soy tu fan!!! Saludos may. Bendiciones y muchos exitos mas! eres una mujer ejemplo a seguir.
Felicitaciones. Mayte, por esa gran trayectoria de éxitos, a pesar de los obstáculos, mucha inteligencia, sabiduría y voluntad tienes, saludos afectuosos a todos a María Luisa tu mamá éramos vecinos allá en el pueblo,
Mayte, es una agradable sorpresa verte realizada., el tiempo vuela, coincidimos en Alcom (estabas en el grupo de Juanito Galvan, por cierto una gran persona) ya hace algunos ayeres y recuerdo que ademas de enfocada en tus objetivos tenias una gran disciplina. Se que vendran muchos exitos a tu vida. Saludos